Un año de fracaso político y social

-Después de diversas promesas que no se han cumplido y con una política completamente destinada a las intereses de grandes corporaciones sobre todo constructoras, el gobierno de Héctor Astudillo, ha fracasado en la principal prioridad de los guerrerenses, garantizar el estado de derecho y la seguridad. Un ejemplo concreto el descontrol y violencia desatada en la Tierra Caliente, grupos armados que confrontan al estado, que toman pueblos enteros, bloquean carreteras, incendian cientos de vehículos y violentan a periodistas que no viajan junto con el Gobernador en avión o helicóptero, que sufrieron amenazas y fueron despojados de sus equipos de trabajo.

Además un puerto de Acapulco cooptado por el crimen, donde el Presidente Municipal amurallado, dice frases y acciones que solo él se creé, mientras todos los días dejan cuerpos mutilados en distintas zonas, balean negocios y la extorsión es la boleta de pago para poder seguir trabajando o seguir vivo. Miles de estudiantes acuden a las escuelas que son vigiladas por la policía y militares en las entradas, profesores que todos los días sortean las vicisitudes de ser agredidos, amenazados o extorsionados. El constante cierre de negocios y homicidio de propietarios o encargados de negocios o mercados es viral y sin control.

La incapacidad de Astudillo para lograr Orden y Paz ha quedado demostrada, no puede, no sabe, su gabinete ha fracasado y no se ven cambios sustanciales para enfrentar la terrible situación. Nadie está a salvo de sufrir una agresión, una extorsión o un secuestro… De acuerdo con agencias internacionales México es el segundo país más violento del mundo, abajo solo de Afganistán, el estado de Guerrero ayuda mucho siendo el estado más violento del país. Se necesitan cambios y accione drásticas que den resultados… De lo contrario, la idea que tienen círculos internacionales, es que en Guerrero sigue controlado por la narco política, que cuida solo zonas turísticas y zonas de producción de enervantes para su cosecha, producción y exportación. Dejando claro la incapacidad de reactivar la seguridad y la paz social.

¡Qué Caray!

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*Nuestra solidaridad con los periodistas que sufrieron amenazas y robo, ante la falta de garantías para su actividad periodística.